SANTO DOMINGO, RD.- El presidente Luis Abinader firmó este jueves el Pacto de Nación por la crisis de Haití, con el apoyo del liderazgo político y académico nacional, que está basado en cuatro pilares fundamentales: Política de Relaciones Exteriores, Política Migratoria, Política Fronteriza y Política Económica.
El Pacto fue producto de un llamado que hizo el presidente Abinader el 27 de febrero de este año al liderazgo político nacional, que hoy se materializa. La coordinación general estuvo a cargo del ministro administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza, y la ejecución de los trabajos, a cargo del viceministro de Gobierno y Sociedad, Andrés Lugo Risk.
Trabajaron y firmaron el pacto 28 partidos políticos, incluyendo algunos de la oposición: Partido Revolucionario Moderno (PRM), Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Dominicanos por el Cambio (DxC), Partido de Unidad Nacional (PUN), Bloque Institucional Social Demócrata (BIS), Partido Cívico Renovador (PCR), Partido Humanista Dominicano (PHD), Partido Movimiento Demócrata Alternativo (MODA), Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), Frente Amplio por la Dignidad Nacional (Frente Amplio), Alianza por la Democracia (APD), País Posible (PP), Partido Primero la Gente (PPG) y Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano (PQDC).
Además, Partido de Acción Liberal (PAL), Partido Unión Demócrata Cristiana (UDC), Partido Liberal Reformista (PLR), Fuerza Nacional Progresista (FNP), Partido Revolucionario Independiente (PRI), Partido Demócrata Popular (PDP), Partido Nacional Voluntad Ciudadana (PNVC), Partido Alianza País (ALPAÍS), Justicia Social (JS), Partido Demócrata Institucional (PDI), Movimiento Nacional Balaguerista (MNB), Partido Verde Dominicano (VERDE), Partido Popular Progresista (PPP) y Movimiento Izquierda Unida (MIU).
También, una veintena de académicos e intelectuales, incluyendo siete rectores de universidades: Juan Daniel Balcácer, Fernando Ferrán, Eduardo García Michel, Roberto Cassá, Bernardo Vega, Manuel Núñez, Wilfredo Lozano, Manuel Robles, Julio Ortega Tous, Iván Gatón, Raúl de Moya Español, Miguel Reyes Sánchez, José Miguel Vásquez, Luis Humberto Vargas, Humberto Pérez, Manuel Bergés, junto con el rector de la UNPHU, Miguel Fiallo; el de la UASD, Editrudis Beltrán; el de la PUCMM, Secilio Espinal; de UNIBE, Odile Camilo Vincent; de UNAPEC, Franklin Holguín Haché; de la UCSD, monseñor Benito Ángeles, y de INTEC, Julio Sánchez Maríñez.
Durante el acto de firma, el presidente Abinader felicitó a cada uno de los partidos políticos y los líderes de la sociedad civil, académicos que dijeron presente en esta firma porque dijo, esta es una respuesta al país, una respuesta patriótica no partidista.
“Y todavía espero que los partidos políticos que no estén aquí presentes, tener siempre la puerta y la silla preparada para cada uno de ellos, para que participen en esta toma de decisiones que como dije, no debe de tener ningún cerco partidista sino un sentido nacional y patriótico. Y eso es lo que esperamos”, expresó Abinader.
El mandatario manifestó que para este pacto se deberán hacer comisiones que permitan dar seguimiento a cada una de las decisiones que se tomen.“Tiene que haber un equipo y una comisión ejecutiva para decisiones y consultas rápidas de esta situación muy dinámica que se da con la República de Haití y en la cual nos gustaría y es nuestro compromiso tener siempre el consenso nacional para una situación tan especial y crítica como la que estamos viviendo nosotros en relación con Haití”.
República Dominicana debería de estar unida y en consenso
Consideró que, en este como en cualquier otro tema, aunque en algunos puntos existan diferencias y haya críticas de la oposición, como es normal en una sociedad democrática, la República Dominicana debería de estar unida y en consenso en relación con este tema nacional.
El jefe de Estado advirtió que, si bien la situación del vecino país ha estado muy especial y crítica, los momentos que vienen no van a ser diferentes.
“Los retos van a ser similares o mayores, por lo tanto, el país debe estar unido y debe tener el consenso para seguir llevando estos temas con un sentido nacional, con un sentido patriótico, con un sentido humano, pero siempre teniendo en cuenta las características tan especiales que como país hemos tenido que vivir con la situación casi única de Haití; única en la región y muy particular en el mundo esa situación de nuestro vecino país”, enfatizó.
El presidente Abinader destacó que el liderazgo político, académicos e intelectuales habla muy bien de la República Dominicana, de su sociedad, que puede y debe ponerse de acuerdo en los temas sagrados para el país como es este.
Enfrentar los efectos de la crisis haitiana
De su lado, el viceministro de Gobierno y Sociedad, Andrés Lugo Risk, recordó que ya se cumplen 8 meses de que el presidente Abinader llamara al liderazgo político nacional a trabajar unidos en la presentación al país del pacto para la formulación y ejecución de políticas de Estado frente a la situación de Haití, donde se encuentra el liderazgo político y académico de la República Dominicana para enfrentar los efectos de la crisis haitiana.
“El presidente ha querido y nos ha instruido a expresar que este pacto, este acuerdo tiene la intención de que se ejecute y se mantenga actualizado según el desarrollo de la crisis del hermano país. Por consiguiente, ha propuesto dos aspectos fundamentales, primero que este pacto se lleve a todos los sectores de la vida nacional, sociales, laborales, empresariales, profesionales, a las demás academias, a todos los espacios de interacción social, a todas las fundaciones”, expuso Lugo.
Pilares del Pacto
Política de Relaciones Exteriores: La República Dominicana está dispuesta a estimular y respaldar a la comunidad internacional en el esfuerzo de rescate y reconstrucción de Haití, siempre y cuando las soluciones estén encaminadas a: primero, procurar la pacificación de Haití; segundo, asistir económicamente a dicho país y su población, por medio de un plan de crecimiento y desarrollo, a mediano y largo plazo; tercero, incentivar su institucionalización; y cuarto, garantizar el respeto de la integridad territorial y demográfica de las dos naciones que coexisten en la isla de Santo Domingo.
Política Migratoria: La República Dominicana enfrenta en la actualidad un fenómeno que dejó de ser solo un problema de migración, para convertirse también en un impostergable reto a la seguridad nacional y regional; reto que impacta, por su magnitud y complejidad, a su ordenamiento jurídico e institucional. Y, por eso, en tanto que responsable primero y último de su orden constitucional y de sus compromisos internacionales, defiende en materia migratoria el principio de la debida regulación del ingreso y tránsito a través de sus fronteras, así como la permanencia y el libre desempeño del ejercicio laboral de nacionales extranjeros debidamente autorizados para habitar e interactuar en suelo dominicano, de conformidad con las disposiciones legales que rigen en todo el territorio nacional.
Política Fronteriza: Un gran compromiso patrio de todo dominicano y, por ende, del Estado, es salvaguardar la integridad de sus fronteras, así como la convivencia en la misma, sin ceder ni retroceder en el dominio y gestión responsable de su territorio, como punto de encuentro y de separación, tanto con nacionales haitianos, como con otros extranjeros.
Política Económica: Las autoridades gubernamentales, apoyadas en el sector privado, tanto dominicano como internacional, han de incentivar y expandir el financiamiento competitivo, tanto para las exportaciones hacia Haití, así como para desarrollar proyectos en ese país, en particular los que empleen mano de obra haitiana e impliquen inversiones en zonas francas, agroforestales y de manejo integrado de recursos naturales renovables.